El 9 de noviembre de 2023 entró en vigor el Decreto Ley 3/2023, de 7 de noviembre, de la Generalitat de Catalunya, que establece una nueva regulación para los pisos turísticos, sujetándolos a la obtención previa de licencia urbanística. Dicha licencia se exigirá en aquellos municipios de Catalunya donde existe problemas de acceso a la vivienda, y aquellos otros municipios en donde la concentración de 5 o más viviendas turísticas por cada 100 habitantes, pone en riesgo el equilibrio social e influye al alza el precio de la vivienda.
Hasta la fecha el registro de pisos turísticos solo requería de una solicitud, disponer de la cédula de habitabilidad vigente, estar amueblado, y acompañar una declaración responsable del propietario. A partir de ahora, la nueva normativa endurecerá los trámites para la concesión de la actividad de pisos turísticos, serán los ayuntamientos quienes, a través de sus normas urbanísticas, determinen cuantos pisos turísticos permiten. En todo caso, las licencias dejarán de ser indefinidas y se concederán por un periodo de cinco años, prorrogables por otros cinco años más, si el planeamiento urbanístico lo permite.
En cuanto a los pisos turísticos existentes, la norma establece un régimen transitorio. Así pues, los pisos turísticos que ya cuentan con la correspondiente habilitación deberán renovar sus títulos en un periodo máximo de cinco años desde la entrada en vigor de este decreto y, en todo caso, si la corporación municipal acredita que no hay suelo suficiente para garantizar el acceso a la vivienda, deberán cesar en su actividad.
En la demarcación de Tarragona esta normativa afectará a 34 municipios:
Alcanar, Altafulla, Amposta, Arbolí, Calafell, Cambrils, Capafonts, Cornudella de Montsant, Cubelles, Deltebre, El Perelló, El Vendrell, Falset , La Canonja , La Morera del Montsant, l’Ametlla de Mar, l’Ampolla, Margalef, Mont-roig del Camp, Mora la Nova, Pineda de Mar, Poboleda, Prades, Pratdip, Reus, Roda de Berà, Roquetes, Salou, Siurana, Tarragona, Torredembarra, Tortosa,Valls, Vandellòs i l’Hospitalet de l’Infant i Vila-Seca.
Con carácter general, la nueva regulación establece una limitación a la concesión de dichas licencias: en ningún caso se podrán otorgar más licencias que las resultantes de aplicar un máximo de 10 viviendas de uso turístico por cada 100 habitantes.
Atendiendo a los datos publicados por el Departament d’Empresa i Treball, de los 34 municipios afectados en la provincia de Tarragona, existen localidades a lo largo de la Costa Dorada como Salou, Mont-roig del Camp, l’Ametlla de Mar, Margalef y L’Ampolla, que superan en exceso el nuevo límite de licencias. El caso de Salou es el más relevante, por ser la localidad donde más se reducirá el número de licencias al superar en más de un 59% las permitidas por la nueva ley.